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La Comisión Paritaria que regula el acuerdo de interlínea
entre Algeciras y Ceuta tiene nuevo presidente. Tras la
dimisión de Rui Marques, director general de
Acciona-Trasmediterránea y presidente de la misma, el
panorama es muy diferente. La marcha del ejecutivo de
Acciona vino provocada por la salida de la naviera de la
intercambiabilidad ya que dicha Comisión es la que regula
este aspecto por el que se está librando una ‘batalla’ en el
Estrecho.
El nuevo presidente de la Comisión Paritaria es Hernán Calvo
y el secretario general de la misma, Adolfo Utor, ambos
consejero delegado y presidente de la hispano-argentina
Buquebús y de la mallorquina Baleària respectivamente. Ambas
navieras han conformado un nuevo escenario tras la salida
del gigante Acciona-Trasmediterránea de la
intercambiabilidad y han decidido llevar a cabo la
resolución del Tribunal de Defensa de la Competencia del
pasado 16 de noviembre que recoge que el intercambio de
billetes “emana de un principio de aplicación voluntaria de
las partes”. Y esto es lo que harán Buquebús y Baleària,
llevar a cabo una “intercambiabilidad total” entre ambas
navieras.
Según expresaron los ejecutivos de ambas compañías con este
acuerdo pretenden obtener mejores resultados por el interés
de la ciudadanía de Ceuta. “Son nuestros clientes y como
empresa que cumple un servicio siempre pretendemos
satisfacer al consumidor y esperamos que esta medida
contribuya a ello”, expresó Utor, presidente de Baleària.
Además Utor indicó que con la decisión tomada por la
Comisión Paritaria de la que es secretario general
“potencian” la sentencia del TDC para que los billetes sean
intercambiables. “Insistimos en la idea de intercambio total
y nos acogemos a la sentencia que dice que las compañías son
soberanas para poder aplicarlo”.
24 salidas diarias
No solo informaron sobre la nueva situación de la
intercambiabilidad y los cambios en la Comisión Paritaria.
Además los dirigentes de las navieras pondrán en
conocimiento, hoy mismo, a la ciudadanía de los horarios de
las 24 salidas diarias que entre ambas compañías llevarán a
cabo, 12 desde Algeciras y otras tantas desde Ceuta. “En
estos momentos debemos hacer este esfuerzo porque es una
necesidad, ya que nos hemos echo eco de las demandas de los
ceutíes”.
Por lo tanto se configuraran un total de 35 salidas diarias,
sumando las 11 que llevan a cabo Transmediterránea y
Euroferrys. Esta competencia beneficiará a los ceutíes que
verán como el número de barcos aumenta hasta tal punto que
habrá salidas constantes.
Nuevo Panorama
La situación del Estrecho queda dividida en dos en estos
momentos. Por un lado se encuentran Baleària y Buquebús,
aliados en la intercambiabilidad “total” para intentar
competir contra el ‘gigante’ Acciona-Trasmediterránea, que
absorvió hace unos meses a la naviera de capital algecireño,
Euroferrys.
El presidente de Baleària, Adolfo Utor, comentó que desde su
compañía siempre tuvieron la intención de mantener la
intercambiabilidad, siendo conscientes de la importancia que
tiene ésta entre la ciudadanía. “Sabemos del excepticismo
que existe entre los ceutíes de las buenas intenciones que
puedan tener las navieras, pero a pesar de esta situación
recogemos el clamor del pueblo de Ceuta y plantemos un
intercambio total de billetes”, afirmó Utor.
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“Combatiremos contra el fraude de billetes en la línea
Ceuta-Algeciras”
Otra de las luchas que ambas
compañías llevarán a cabo de forma conjunta será contra los
presuntos casos de fraude que se puedan cometer en la línea
Ceuta-Algeciras. “Esta situación perjudica a las empresas
del sector”, comentó Utor.
Estarán especialmente vigilados los militares que hagan uso
del servicio público debido a los suculentos descuentos de
los que son beneficiarios. El presidente de la compañía
balear hizo alusión a una comunicación entregada por el
Ministerio de Defensa a sus militares en la que se les pedía
que evitaran cometer fraudes en los billetes de barco. Esta
situación se produce tras incrementar el embarque de
supuestos militares en las últimas semanas.
El fraude suele consistir en el uso de esta bonificación por
parte de civiles para embarcar a precio de militares. Utor
explicó que el fraude perjudica al Estado, pero aún más a
las navieras (situación que puede repercutir en el usuario)
porque parte de la tarifa oficial la asumen las propias
compañías, “de ahí que haya que combatirlo”.
Los militares poseen unos atractivos descuentos especiales
en estos trayectos marítimos que les permiten comprar un
billete de ida y vuelta para el Estrecho por un precio que
ronda los 5 euros, frente a los más de 20 que debería abonar
un residente en la Ciudad Autónoma, o los más de 50 que
deberá abonar un no residente.
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