La Asociación Independiente de la Guardia Civil (ASIGC) ha
emitido un comunicado en el que afirma que “la unión
administrativa de las Direcciones Generales de Guardia Civil
y Policía Nacional, lo deja todo como está y es engañosa”.
“Nada va a cambiar, ni en la Guardia Civil, ni en la Policía
Nacional, porque haya un mando común en ambos cuerpos, por
cuanto desde siempre la Secretaría de Estado de Seguridad
era el organismo común de dichas instituciones”, afirma.
Para este colectivo, es más el efecto psicológico que tal
nombramiento suscita, que la trascendencia real que pueda
tener en el mejoramiento de las condiciones profesionales de
los agentes y de la equiparación en derechos.
ASIGC, que también persigue la desmilitarización del cuerpo,
considera que, de esta forma, el Gobierno hace creer que
cumple con una idea reformadora y transformadora de las
Fuerzas de Seguridad, pero sigue sin aumentar el salario de
los agentes, ni les da ilusiones ni expectativas de mejora
en su trabajo y, por supuesto, “sigue violando los derechos
fundamentales de los guardias civiles, al no legislar de
forma acorde con la Constitución y limitar tan solo y no
prohibir, por cuestiones de seguridad nacional, aquellos
derechos que hoy sigue negando a la Guardia Civil, como el
derecho de asociación sindical, con las prerrogativas que
tienen todos los funcionarios y que no tiene nuestra
Institución a la que llaman militar”.
Lo que pretende el Gobierno es “descabezar a la Guardia
Civil, para que los sindicatos de Policía y los sindicatos
de clase puedan ejercer así más influencia sobre la
Institución más valorada del Estado e ir deteriorándola en
beneficio de la afinidad política a su partido” es por eso,
afirma ASIGC, que privilegia a los policías nacionales con
derechos profesionales y colectivos que niega a los guardias
civiles.
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