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Si no fuera suficiente con el cartel de la corrida de toros,
el empresario taurino anunció que habrá un espectáculo de
recortadores al día siguiente, es decir, el 2 de agosto. El
lugar y la hora, las mismas: plaza de toros portátil
instalada en las Heras a partir de las 19.00 horas.
Este espectáculo estaría destinado, sobre todo, a los más
pequeños. Las dos horas de recortes y quiebros se
repartirían en dos sesiones, una primera, más seria, con una
exhibición de expertos en la materia; y una segunda, en la
que participarán de lleno los más pequeños. Alrededor de
cuatro o cinco niños saldrían al ruedo. Los recortadores,
disfrazados, portarían la cabeza de un astado y simularán
una faena.
Esta medida pretende dar entrada a los jóvenes en una
cultura muy arraigada en Andalucía, pero que en Ceuta es
difícil de notar por falta de terreno.
El precio de las entradas para el público en general se
establecería en 15 euros, lo que cuesta en cualquier otra
localidad. Para fomentar la entrada de público se regalarían
en torno a 500 entradas entre los más pequeños.
El espectáculo de los recortadores viene de lejos, sólo hay
que recordar los cuadros que elaboraron los pintores Goya y
Pablo Picasso con motivo de la tauromaquia, sin embargo, en
los últimos años ha recobrado notoriedad gracias al riesgo
que de personas que se enfrentan al toro cuerpo a cuerpo.
Además, la sesión es del interés del público joven, ya que
no se derrama sangre ni se mata al toro de lidia. En Ceuta,
concretamente, se tendría previsto soltar a cinco vacas y
serían tres las personas que protagonizarían los recortes y
requiebros.
El dinero
En cuanto a la probable corrida del día 1, el empresario
aseguró que el caché de los toreros se pagaría con la
taquilla que se obtuviese. El resto sería una apuesta
personal de su entidad y la Ciudad no abonaría más de 40.000
euros.
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fiesta taurina
