Los senadores ceutíes Nicolás Fernández Cucurull y Luz Elena
Sanín, a través de una nota de prensa y en declaraciones a
este periódico, y el presidente del PP de Ceuta, Pedro
Gordillo, en rueda de prensa, corrigieron y rectificaron
ayer al compañero de los dos primeros en la Cámara Alta Luis
Peral, que el lunes incluyó el aumento de los soldados de
origen magrebí en las guarniciones de Ceuta y Melilla como
un peligro para la seguridad de ambas. “Son tan españoles
como los demás”, recordaron al miembro de la Comisión de
Defensa después de que este pidiese disculpas “a quien
pudiera haber ofendido”.
El senador del Partido Popular Luis Peral pidió ayer
disculpas “a quien pudiera haber ofendido” tras citar, en la
Comisión de Defensa que se celebró el lunes en la Cámara
Alta, “la proporción creciente de soldados de origen magrebí
que prestan servicio en las unidades de Ceuta y Melilla”
como uno de los riesgos para la seguridad de las dos
ciudades autónomas que, desde su punto de vista, “no
aconsejan en absoluto reducir el número de efectivos”
militares en cualquiera de ellas. El político madrileño hizo
estas afirmaciones en el curso de un debate con el
secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez, cuáles
eran las razones que manejaba el Gobierno central para “la
desaparición de la II Bandera de La Legión, con sede en la
Ciudad de Melilla, y de la V Bandera de La Legión, con sede
en la Ciudad de Ceuta, así como la conversión en Regimiento
del Mando de Artillería de Costa del Estrecho”.
“Lo único que hice fue constatar un dato estadístico en el
transcurso de un debate sobre la seguridad exterior de Ceuta
y Melilla, especialmente sensible debido a la permanente
reivindicación marroquí sobre ambas y a los antecedentes
existentes”, explicó ayer Peral en declaraciones a este
periódico, al que transmitió su “reconocimiento a la
aportación que históricamente han hecho los soldados de
origen magrebí a las Fuerzas Armadas españolas”.
El senador del PP se corrigió a mediodía, pero minutos antes
UDCE-IU y Coalición por Melilla (CpM), los partidos que
lideran Mohamed Ali y Mustafa Aberchan, ya habían emitido
sus respectivas valoraciones sobre las declaraciones de
Peral. A través de una nota de prensa UDCE anunció que, de
común acuerdo con CpM, gestionará “de forma conjunta y con
el paraguas de IU-Federal” contactar con el presidente del
Senado, el socialista Javier Rojo, “para tramitar la
eliminación de las intervenciones del senador por Madrid de
las actas del Senado por considerarlas hirientes, cargadas
de una profunda ignorancia y rozar la xenofobia”.
“En segundo lugar” UDCE pidió al PP de Ceuta “que repruebe
las declaraciones del senador Luis Peral, las cuales, llenas
de ignorancia y desconocimiento, han ofendido, no sólo a los
propios soldados, sino a toda la comunidad musulmana en
Ceuta en particular y a toda Ceuta en general”.
“En caso de no producirse tal reprobación”, advirtió el
primer grupo de la oposición en la Asamblea, “entenderemos
que el PP ceutí subraya y comparte tales afirmaciones
ignominiosas”. Durante varias horas UDCE-IU barajó la
posibilidad de elevar una moción de urgencia al Pleno de
mañana para pedir de forma institucional la reprobación de
sus palabras.
No hizo falta. A media tarde el senador ceutí Nicolás
Fernández Cucurull aseguró a este periódico que “la posición
del PP ceutí, de sus parlamentarios nacionales y del PP a
nivel nacional” es que “los ceutíes, soldados o no, de
origen magrebí son tan españoles como cualquier otro”. Sus
palabras dejaron satisfecho a Ali.
“No refleja nuestra posición”
“Las palabras del senador Peral no reflejan nuestra
posición”, señaló Cucurull, que alabó la disposición de su
compañero madrileño a que sus palabras no sea recogidas en
la versión definitiva del acta de la Comisión de anteayer,
aunque reiteró que al PP le sigue preocupando “por razones
de índole estratégico, psicológico y económico” el proceso
“de reducción de las Fuerzas Armadas en Ceuta”, un supuesto
que el secretario de Estado volvió a negar anteayer sin que
el PP lo diera por bueno.
El propio Peral insistió a este periódico en que las
explicaciones de Constantino Méndez no le convencieron, ni
en lo referente al recorte de efectivos castrenses en las
dos ciudades autónomas ni en lo que él entiende como un
“repliegue” de la presencia militar española en el Estrecho.
Por ello ayer mismo preguntó por escrito al Gobierno cuántos
efectivos tenían las unidades ceutíes en 2006 y cuántas
tendrán tras la reorganización.
Formalmente y a través de un comunicado a última hora de la
tarde (19.57) el PP “aceptó” las disculpas de Peral por sus
“tan desafortunadas palabras”. “Estamos en contra de la
distinción de los ceutíes por su origen de nacimiento porque
creemos en la igualdad de todos los españoles,
independientemente de su credo o ideología, y defenderemos
siempre este derecho constitucional”, apuntó el PP, que de
forma sorprendente atribuyó el conocimiento de sus palabras
por la opinión pública a la “manipulación” de “algunos
sectores interesados”. “Fue una mala pregunta en una
comisión de defensa del senado, que además ha sido
retirada”, zanjó el partido que lidera Gordillo.
El PSOE ve falso patriotismo
Más tarde todavía, a las 20.11 horas, el PSOE se posicionó
sobre la polémica con un comunicado en el que el coordinador
del Grupo Árabe Socialista en Ceuta, Ahmed Idris, exigía a
Peral que se retractase y le recordaba que “los soldados de
Ceuta y Melilla son igual de españoles que el senador y su
partido, que deben disculparse por cuestionar su integridad
como personas y como soldados sólo porque sus nombres son
musulmanes”.
El secretario general del PSOE de Ceuta, José Antonio
Carracao, tildó de “inadmisibles” las palabras de Peral y
apuntó que “habría que preguntar al senador Popular si lo
que está pidiendo es que se mida el grado de españolidad que
tienen los hombres y mujeres que cumplen los requisitos que
su partido marcó para entrar en el Ejército español o que se
limite su acceso por razón de origen o religión”.
“El PP que vende el discurso de patriotas, no se contenta
con ir criticando al Gobierno de la Nación por el mundo,
sino que ahora ensombrecen la labor del Ejército español y
lo ponen en cuestión. En esa actitud es donde reside el
verdadero peligro”, lamentó. Al conocer la rectificación de
Peral advirtió de que “no se pueden decir cosas como esa y
pretender que se olvide con una disculpa”.
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