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La modificación de las cláusulas
administrativas del nuevo contrato de la línea de interés
público del Estrecho se ha convertido en una prioridad de
Fomento. Lo primoridal de esta situación es que el concurso,
que ha quedado desierto como anunció este diario el pasado
viernes, no se vea afectado en su nueva convocatoria más
allá de un leve retraso en su conclusión. Lo cierto es que
ya se ha comenzado a hacer una excepción con Ceuta desde el
momento en que se van a variar unos requisitos de solvencia
que eran idénticos a los que se exigen en el resto de líneas
de interés público e idénticas también a las que se
contemplaban en el contrato aún en vigor. Cabe esperar, como
decimos, que eso no vaya en detrimento del resultado final
del concurso.
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La gestión en barriadas de la
ciudad ha sido valorada y agradecida en estos últimos cuatro
años por los vecinos, que han visto cómo se producía la tan
ansiada equidad entre el centro y la periferia. El candidato
número 11 por el PP y también viceconsejero de Equipamiento
Urbano y Barriadas, Gregorio García Castañeda, resalta la
función del Gobierno de Vivas en la mejora de los barrios
ceutíes. Y es que, cuando una asociación vecinal solicita
cualquier tipo de equipamiento urbano, para la Ciudad es
símbolo del trabajo bien hecho, ya que se han solucionado
los problemas de base de la zona -como es el caso de las
deficiencias en el saneamiento”. En definitiva, un trabajo
arduo a la par que eficaz y que el PP incluye de nuevo en su
programa: un IV Plan de Barriadas.
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OPINIÓN / EDITORIAL
