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					La trayectoria y el perfil de Francisco Márquez de la Rubia 
					(Ceuta 1964), actual consejero de Hacienda y RRHH de la 
					Ciudad Autónoma y Diputado nacional en el Congreso, es muy 
					tenida en cuenta por el presidente regional del PP, Juan 
					Jesús Vivas. Su capacidad y preparación le hacen ser el 
					mejor candidato al Congreso por el Partido Popular, teniendo 
					en cuenta que es un ‘valor seguro’ en la conexión entre el 
					Ejecutivo autonómico y el Congreso. No han sido pocas, casi 
					una veintena para los poco más de diez meses que ejerce en 
					el cargo tras sustituir a González Pérez, las iniciativas 
					(preguntas directas al Gobierno) relacionadas con asuntos 
					que preocupaban directamente a la Administración ceutí. 
					 
					Márquez es vocal de la Comisión de Interior en el Congreso y 
					vocal de la comisión no permanente de Seguridad Vial y 
					Prevención de Accidentes de Tráfico y ha sido el ponente, 
					por parte del GPP del proyecto de Ley de protección de 
					Infraestructuras Críticas. 
					 
					Licenciado en Derecho, también es teniente coronel del 
					Cuerpo General Superior de las Armas. Piloto de helicópteros 
					(1.800 horas de vuelo), ha estado al mando de unidades 
					aeronavales en Bosnia como miembro del BATALAT en el que se 
					encuadraban unidades de helicópeteros de España, Italia, 
					Alemania y Francia.  
					 
					Francisco Márquez cuenta con un Máster en Instituciones 
					Comunitarias y es experto superior en Gestión Inmobiliaria. 
					 
					Vivas conoce de su capacidad por la experiencia en estos 
					años en los que Márquez de la Rubia ha participado en las 
					negociaciones con el Ministerio de Economía en el asunto de 
					la financiación autónoma donde Ceuta quedó en la mejor de 
					las posiciones.  
					 
					Sus estrechas relaciones con miembros de los distintos 
					gabinetes ministeriales, cuyos miembros forman parte del 
					Congreso de los Diputados, abre puertas a Ceuta y eso es un 
					añadido evidente que no pasa desapercibido en el presidente. 
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