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El juez encargado del registro civil de Ceuta ha autorizado
el matrimonio civil entre Ingrid Rosselyne Mboumba Solo,
nacional de la República de Guinea ys Danielle Nicole Mboume,
ciudadana de Camerún, ambas acogidas durante un año en el
Centro de Estancia Temporal (CETI) de Ceuta a su llegada a
territorio nacional, el 21 de julio de 2010, y hoy
residentes en un centro de acogida de CEAR en Getafe. De
llevarse a término esta unión conyugal sería la primera vez
que se autoriza en España la celebración de un matrimonio de
estas característica, en el que los contrayentes son del
mismo sexo e inmigrantes indocumentados.
Tal como informó la delegación del Gobierno, el escollo de
la falta de “documentación fehaciente” en el expediente de
matrimonio se ha salvado mediante la aplicación, en su
defecto, de las previsiones del artículo 25 de la Convención
de Ginebra sobre el estatuto de los refugiados. “Piénsese
-señalan desde el Registro- que las concelebrantes no
disponen ni de partida literal de nacimiento, ni certificado
de soltería o estado civil, de pasaporte ni documento de
identidad de su país, ni de ninguna otra documentación salvo
la declaración jurada que prestaron ante el encargado del
registro en julio de 2011”.
Desde Madrid o en Ceuta
El gestor del Registro Civil comunicó que, “tras mucho
sopesarlo”, el juez decidió autorizar el matrimonio previa
declaración jurada de los contrayentes por el procedimiento
previsto en el art. 363 del Rg. RC. Al indicársele al
funcionario registral que las interesadas ya no se
encuentran en Ceuta este propuso dos soluciones, la primera
remitir una declaración a Madrid para que la devuelvan
firmada y una vez resuelta formalmente la autorización del
matrimonio, derivar la decisión al Registro Civil de Getafe
para la celebración del acto civil. También cabe la
posibilidad de que las interesadas se desplacen a Ceuta para
celebrar el matrimonio en esta ciudad.
Por parte del CETI se contactará con las interesadas a fin
de que manifiesten si desean proseguir con los trámites para
la celebración del matrimonio y, si así fuese, el lugar en
el que desean contraerlo. El director del CETI, Carlos
Bengoechea, cree probable que deseen casarse en Ceuta, dado
que se marcharon de la ciudad “muy agradecidas” por la ayuda
que se les prestó en el CETI y por la acogida dispensada en
Ceuta, donde estaban “muy integradas”.
Según los datos facilitados por la Delegación del Gobierno,
las dos mujeres solicitaron Protección Internacional en
agosto de 2010, y fueron asistidas en los trámites por el
letrado permamente de CEAR en el CETI, Alejandro Romero. En
septiembre de 2011 fueron derivadas al CEAR de Getafe, en
Madrid, ya que, pese a las medidas protectoras adoptadas y a
su integración en la ciudad, que fue destacada por
Bengoechea, ayer en declaraciones a este diario, las mujeres
declararon que “en algunas ocasiones se veían obligadas a
soportar el acoso, insultos y amenazas proferidas por un
reducido grupo de residentes a causa de su declarada
orientación homosexual”. En noviembre de 2011 les fue
reconocido el estatuto de refugiadas y fueron documentadas
por el Ministerio del Interior.
Desde el movimiento LGTB ‘...y a ti qué? se expresó ayer en
un comunicado su “satisfacción” por la autorización de este
matrimonio civil, que las propias contrayentes, aseguran,
les comunicaron el pasado fin de semana. “Este es sin lugar
a dudas un paso más de estas dos mujeres para conseguir
libertad e igualdad pero también un símbolo de esperanza
para muchas otras”, señala esta asociación, que subraya que
con esta decisión de las autoridades españolas “se hace
realidad un sueño que hoy día es imposible para muchas
mujeres lesbianas africanas, condenadas al silencio y el
rechazo”.
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