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ACTUALIDAD - DOMINGO, 26 DE MAYO DE 2013


ángel gómez. p. zumeta.

entrevista / Ángel Gómez
 

«El proceso de selección es lo que ha retrasado la puesta en marcha de la Policía de Barrio»

El superintendente jefe de la Policía Local, Ángel Gómez, resume este último año de trabajo y destaca la mejora en la colaboración entre los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad
 

CEUTA
Paula Zumeta

ceuta
@elpueblodeceuta.com

El superintendente jefe de la Policía Local ha informado de que el proceso de selección administrativo es lo que ha provocado el “retraso” en la puesta en marcha de la Policía de Barrio, después de que la consejera de Presidencia y Gobernación, Yolanda Bel, anunciara a finales del pasado año que la UPAC iba a estar operativa en el primer trimestre del año. Con motivo de la celebración el pasado viernes de San Urbano, el patrón del Cuerpo Municipal, Gómez hace repaso a sus 32 años de carrera en la ciudad y habla del incremento de denuncias en cuanto a los empadronamientos fraudulentos o las construcciones ilegales. Además, señala que “en estos momentos”. la relación con los sindicatos es “fluída”.

Pregunta.- ¿Cómo valora los 32 años que lleva de trayectoria profesional en la ciudad?

Respuesta.- Llegué a Ceuta el 13 de mayo del año 1974 y tomé posesión en el Cuerpo Superior de Policía cuando era entonces comisario Tomás Olivares González, quien me destinó a la Comisaría de Los Rosales, donde fue jefe de Inspección durante unos dos años. Después ya pasé a la Comisaría Central y ya a la Unidad de Información del CNP. En el año 1981 ingresé como jefe de la Policía Local, que entonces era Policía Municipal, del Ayuntamiento de Ceuta. Han sido 32 años que han pasado en un suspiro, me gusta mi trabajo y soy de los que vienen a trabajar por vocación, por lo cual siempre he venido a gusto a mi trabajo a pesar de los altos y bajos y de las dificultades que entraña el dirigir una Policía, que, para mí, es la que más competencias tiene. Al margen de las competencias compartidas con otras Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, como puede la vigilancia de espacios públicos, la seguridad ciudadana o los acontecimientos públicos, tenemos las propias de la Ciudad -medio ambiente, urbanismo, sanidad, etc-. También la ordenación y regulación del Tráfico es una cosa propia de la Policía Local. La verdad es que ha ido bien. Estoy llegando al final de mi vida profesional, me quedan dos años y medio y estoy satisfecho de haberme entregado en cuerpo y alma a la Policía Local con mis errores, mis aciertos.

P.- Durante estos años ha habido periodos en los que no ha estado al frente de la Policía Local, el más actual fue como director general de Protección Civil, ¿qué es lo que le han aportado estas etapas?

R.- He tenido cuatro paréntesis en 32 años. Uno fue en el año 1982, cuando un alcalde tuvo un problema conmigo y me incoó un expediente disciplinario y me suspendió de empleo y sueldo. Estuve más de un año en pleitos y al final gané el juicio en el Contencioso y con la sentencia se me devolvió a mi puesto. De ahí también me fui al Penal, donde condenaron a los responsables a ocho años de inhabilitación política y a indemnizarme con una cierta cantidad de dinero. A partir de entonces no hubo ningún problema hasta que llegó el GIL a la ciudad. El partido puso en la Policía Local a cinco altos mandos militares, entre ellos, un general de brigada, dos comandantes, un teniente coronel... En definitiva iban a hacer el mismo trabajo que hacía yo. Me dijeron que no contaban conmigo porque tenían otra forma de trabajo; teniendo en cuenta que la plaza es mía en propiedad, me podría haber negado, pero abiertamente se me amenazó con abrirme un expediente disciplinario por bajo rendimiento si me quedaba. En esa ocasión opté por no pleitear y me dieron el cargo de director de la Academia y así estuve los meses que estuvo el GIL en el Gobierno. De forma posterior, el presidente de la Ciudad me llamó para que se pusiera un poco en orden el área de Protección Civil, que estaba un poco abandonada. Allí accedí al cargo de director general de Gobernación, donde estuve dos años. Con el presidente Vivas tengo una relación por tres vías, una lógicamente como presidente, otra como amigo porque lo conozco desde hace 40 años y otra como presidente del Partido Popular, al cual me honro pertenecer. La última etapa fue hace dos años, también se me llamó para responsabilidades políticas a nivel de director general, donde estuvo un año y cinco meses. Lo que sí está claro es que soy titular de la plaza de jefe de la Policía Local y hasta que no me jubile es mía en propiedad porque la alcancé por oposición y aquí estaré hasta noviembre de 2015, que es cuando cumplo los 65 años y por imperativo legal me jubilo.

P.- ¿Cuáles cree que son los éxitos más importantes que ha conseguido en esta larga carrera?

R.- Cuando llegué a la Policía Local estaba en los sótanos del Ayuntamiento. El jefe tenía un despacho y había otra habitación más. Allí no había nada más y aquello me pareció tercermundista e indigno. En aquella época había unos 130 policías y lo primero que hice, con el apoyo incondicional del entonces alcalde Ricardo Muñoz Rodríguez -al cual quiero rendir un homenaje porque creo que ha sido uno de los mejores alcaldes que ha tenido esta ciudad-, fue cambiar la imagen de la Policía, del color gris del uniforme al azul marino. La segunda medida fue trasladar las dependencias al cuartel del Revellín, donde se rehabilitó la zona que íbamos a ocupar. La Policía, cuando llegué, disponía de dos o tres motocicletas, una grúa y un vehículo. No había más. Lo que hice en el primer año fue dotar al Cuerpo de una organización: se creó la unidad de Seguridad Ciudadana, que no existía, se dividió a la Policía por secciones y unidades y además se adquirieron vehículos y motocicletas. También se dotó a los agentes de comunicaciones hasta llegar a la Policía Local que hoy todos conocemos, que cuenta con equipos de sonometría, para medir la velocidad por radar, equipos de todo tipo como antidisturbios, para repeler agresiones. Es decir, se ha ido dotando a la Policía.

P.- ¿A qué político destacaría más en estos años de trabajo?

R.- Además de a Ricardo Muñoz me gustaría destacar en estos 32 años de trabajo a otras cuatro personas. He conocido a muchos concejales de Gobernación pero tengo un especial recuerdo por su entrega, apoyo y su relación con el Cuerpo, de Emilio Lamorena López. También por Manolo Gómez Berlanga, quien, aunque era una persona que en cuanto a conocimientos de la Policía no los tenía en profundidad, sí era un luchador, un trabajador y uno más de nosotros. Ha sido uno de los mejores que he tenido. Por otro lado, Jesús Cordente, que fue un apoyo. Y por último me gustaría destacar a Yolanda Bel porque mi relación con ella tanto en el área de Protección Civil como en la Policía es muy buena. Es una mujer comprometida con la Policía Local y los problemas del Cuerpo le afectan mucho. Hay que reconocer su entrega y su lucha y es una de los cuatro mejores de los veinte que he tenido. Es una persona comprometida que se integra en el colectivo y se preocupa. Es justo reconocer su trabajo, su labor y su dedicación.

P.- ¿Cuáles son los objetivos a corto plazo de la Policía Local?

R.- El objetivo es seguir tecnificando el Cuerpo y dotándolo de los medios materiales necesarios para realizar nuestra labor. Sabemos que ahora estamos en época de crisis y hay que relajar un poco las peticiones, pero lógicamente esto es un servicio de seguridad y necesita que sea dotado de los últimos medios puesto que los delincuentes no deben de ir por delante de nosotros en cuanto a medios técnicos. Cuando digo delincuentes son los responsables de delitos o los responsables de faltas contra la Ley de Seguridad Vial, contra las ordenanzas municipales... La Policía tiene que estar preparada técnicamente para erradicar estos actos que lo que hacen es que la sociedad no viva en paz. A lo que aspiramos es a vivir en una sociedad en la que se respeten las normas y los derechos de todos los ciudadanos.

P.- En cuanto a los sistemas técnicos con los que cuenta la Policía, algunos sindicatos han manifestado su preocupación, por ejemplo, por la falta de cobertura en el sistema TETRA; también han criticado las organizaciones sindicales que tienen que los agentes tienen que comprar material como cascos o linternas e incluso hablan de la poca eficacia de los nuevos vehículos zeta, ¿qué es lo que tiene que decir?

R.- Aquí cuando se hace una compra, y yo no estoy metido en ninguna comisión, se presentan unas ofertas por parte de determinadas empresas y la comisión de contratación oportuna valora la oferta que hacen las empresas en relación con el precio. Lógicamente a mí me gustaría tener en la Policía BMW o Audi para trabajar porque es una garantía y una seguridad. Son vehículos de alto coste y lógicamente repercute en la seguridad, en el rendimiento y la duración. Pero los presupuestos con los que disponemos nos obligan a ir a marcas de segundo nivel, pero no por ello son malas y tampoco quiero desprestigiarlas. La Policía ha tenido coches Renault, Peugeot, Citröen, Ford... Ha tenido muchas marcas de vehículos pero tenemos que entrar dentro de unos parámetros de fondos públicos, en los que nos movemos. El coche que se acaba de comprar -un Citröen Picasso-, ya lo tenía la Policía Nacional. No podemos pretender que un vehículo sea bueno a juicio de todos los policías de la plantilla. Somos unos 300 policías y cada uno tiene una opinión. Si dicen que la luna del último coche es muy grande... Bueno, son detalles que para mí en ningún caso oscurecen que la Ciudad haya dotado de diez vehículos a la Policía. Ya ahora en los próximos que se vayan a comprar vamos a dar participación a los policías y que manifiesten qué tipos de vehículos o motocicletas estiman que es el que sirve dentro de los parámetros económicos nos movemos... Esperemos que sea al gusto de quienes lo van a usar, que son la mayoría de funcionarios de la Policía Local.

P.- ¿Y en cuanto al resto de material y el TETRA?

R.- El TETRA, como todo instrumento mecánico, ya sean vehículos o aparatos de transmisiones, tiene sus fallos y momentos de que no hay cobertura, al igual que los móviles. La Ciudad ha hecho una contrata con una empresa que es la que vendió el sistema TETRA para el mantenimiento de los equipos. Ahora mismo sí estoy recibiendo algunos partes de policías a los que no les funciona el equipo o que lo han entregado porque está en malas condiciones y demás, pero en términos generales el equipo de transmisiones funciona correctamente. El hecho de que un día se caiga la red por una tormenta o por lluvia o viento durante un espacio de tiempo, no quiere decir que el sistema sea malo o no funcione. En cuanto a los cascos y demás, se está renovando continuamente el material. Hay que tener en cuenta el periodo de crisis y hay que se proporcional y solidario y procurar, dentro de nuestras necesidades, ajustarnos a lo que podemos tener. Es decir, a mí me gustaría tener un helicóptero para la Policía y los mejores y más modernos medios, pero somos lo que somos y estamos donde estamos.

P.- Entonces está satisfecho con el material con el que cuentan los agentes...

R.- Creo que la Policía Local de Ceuta es una de las mejor dotadas del país. Nunca se llega al límite y a la demanda, pero hay que destacar el armamento, equipos, vestuario, vehículos -este año se van a comprar más-, los radar de mediciones, los sonómetros y una base informática en la que tenemos acceso a todos los datos de interés para la Policía Local, tanto de datos de identificación de vehículos como datos patronales, de antecedentes, etc. Es decir, estamos conectados a todos los sistemas de informática. Creo que es una Policía moderna, eficaz y, aunque todo es mejorable, estamos trabajando con los medios que creo que son suficientes.

P.- ¿No cree que a la Policía Local se la ‘mima’ más que al Cuerpo de Bomberos para el que sólo se va a adquirir una bomba hidráulica, una grúa y una ‘pick up’?

R.- Siete coches cuestan la mitad que dos camiones. Un camión de bomberos se va a unos 120.000 euros y en la Policía se compran ocho coches con esta cantidad. Es decir, la inversión es proporcional. Sin embargo, no quiero entrar en las necesidades de los Bomberos ni en sus reivindicaciones profesionales porque no me compete. Yo hablo de la Policía y de lo que es lo mío.

P.- ¿Cree que ha mejorado la colaboración y coordinación entre los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad desde que Pedro Luis Mélida está al frente del Cuerpo Nacional de Policía (CNP)?

R.- Cada uno de los Cuerpos de Seguridad tiene sus competencias y las ejercemos. Con el jefe superior de Policía Nacional como con el teniente coronel de la Guardia Civil mantengo conversaciones un día sí y uno no. Nos llamamos, hablamos a nivel de responsables. A nivel de los agentes también ocurre lo mismo. Hay un entendimiento y se hacen controles conjuntos, operaciones conjuntas, etc., sin prejuicio del corporativismo que cada uno tenga de querer trabajar y hacer servicios y que sean importantes para la sociedad. Creo que la colaboración es buena, es suficiente. Pero todo es mejorable y todo se puede perfeccionar. Sin embargo, estamos hablando de obras humanas y todas las obras humanas ‘hacen aguas’ por algún lado y tienen defectos. El que no reconozca eso, es un estúpido. Yo reconozco el trabajo de la Policía Local y reconozco lo bueno, el servicio que presta y cómo lo presta. También sé cuáles son nuestros fallos, nuestros defectos y nuestras carencias y procuro ponerles remedio. Pero somos humanos y como tal tenemos que aceptar nuestros errores y nuestros fallos. Soy el primero que cuando se equivoca pide perdón y no me cuesta trabajo hacerlo. Las relaciones con los demás Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, también con la Policía Portuaria y con la Policía Militar, son extraordinarias.

P.- Los últimos datos del Ministerio del Interior sobre la criminalidad en Ceuta arrojan un 16% de descenso con respecto al último trimestre del pasado año; a pesar de que la competencia en Seguridad Ciudadana sea del CNP, ¿cómo valora estas cifras puesto que la Policía Local también lleva a cabo una labor de ‘calle’?

R.- Todos ponemos nuestro granito de arena, aunque qué duda cabe que la mayor responsabilidad en Seguridad Ciudadana y las competencias son de la Policía Nacional. Pero la Policía Local creo que realiza una importante labor en esta materia, que es un área de colaboración, de ayuda, no es una competencia exclusiva. Pero la Policía Local, el año pasado, practicó un total de 800 detenciones y este año seguimos más o menos el mismo camino. Es decir, se colabora y creo que sí, que la Policía Local, no aquí en Ceuta sino en cualquier ciudad de España, hoy día es un pilar fundamental en la colaboración y en el mantenimiento de la seguridad ciudadana.

P.- En cuanto a las competencias propias de la Policía Local, ¿cuáles cree que han sido los puntos fuertes de trabajo en este último año, qué es en lo que se ha mejorado más?

R.- Nos estamos dedicando fundamentalmente a la regulación, dirección y organización del tráfico, que es una misión exclusiva de la Policía Local. También en el tema de la venta ambulante hemos multiplicado por tres las intervenciones, si hace un año se cogían 100 kilos ahora son 300; también hacemos vigilancia de la venta de productos falsificados; también hacemos vigilancia en los centros laborales para impedir el absentismo escolar... En materia de seguridad ciudadana, las actas por consumo y tenencia de estupefacientes se han duplicado en la vía pública. Tratamos de erradicar esta lacra que es la droga desde la juventud con nuestro trabajo. También hemos incrementado las actuaciones en el tema de obras ilegales, en las inspecciones, en vertidos ilegales y en Extranjería. En este último caso estamos haciendo una gran labor en colaboración con la Oficina Única de Extranjería y con el Negociado de Estadística del Ayuntamiento que es el que lleva todo el tema de empadronamientos fraudulentos.

P.- ¿Cuál es el número de empadronamientos fraudulentos que se ha registrado desde que se intensificaran los trabajos, que fueron anunciados tanto por la Ciudad como por la Delegación de Gobierno el pasado año?

R.- En este tema se ha mostrado un interés especial por parte de la consejera de Presidencia y Gobernación, que trata de evitar que haya fraudes a la Seguridad Social y que haya fraudes al Estado. Es decir, que haya personas que manifiesten residir en la Ciudad al objeto de cobrar prestaciones sociales, ayudas, paro y demás. Lo que se está haciendo es una revisión importante de aquellos extranjeros que por las razones que sea no residen en Ceuta aunque sí estén empadronados. Tenemos un equipo de policías destinado exclusivamente a esa labor, la cual están realizando de una forma eficaz. Exactamente no sé el número de bajas que se han producido en el Padrón, pero son cientos.

P.- ¿Han intensificado los controles en cuanto a construcciones ilegales se refiere, además de solicitar licencias de apertura a comercios?

R.- A todos los comercios que se ve de nueva creación se les pide toda la documentación y las licencias, al margen de que, en algunos casos, si sospechamos de que un establecimiento no tiene licencia de apertura o de terrazas o incumple algo de lo establecido en las ordenanzas municipales, de forma inmediata se procede a su denuncia. Y en el caso de las obras ilegales pues ocurre lo mismo. Cuando vemos un cubo de arena en la calle o de cemento o un contenedor con escombros, de forma inmediata se localiza la obra, se le pide la licencia, los permisos... Efectivamente ha habido numerosas denuncias por obras que se están realizando, ya sean construcciones mayores o menores, sin la correspondiente licencia.

P.- La consejera de Presidencia, Gobernación y Empleo, Yolanda Bel, anunciaba en junio del pasado año que pretendía reunirse con los sindicatos para tratar el asunto de los horarios, por ejemplo, del turno americano; sin embargo, tan sólo ha sido usted el que se ha reunido con las organizaciones sindicales, ¿qué hay de nuevo en este tema?

R.- El tema se habló. Hubieron unas duras negociaciones porque se dilataron en el tiempo. Al final se llegó a un punto de encuentro y se tuvieron en cuenta las consideraciones de los sindicatos y lo que solicitaban en combinación lógicamente con la reducción de horarios que ha habido por parte del Gobierno en cuanto a la jornada laboral. Ahora mismo todos los horarios de la Policía Local están cerrados y todo el mundo está de acuerdo y bien.

P.- ¿Ya no hay problemas con la solicitud de que los domingos contaran como festivos o hubiera algún tiempo de compensación para los agentes pertenecientes al turno americano?

R.- No. Se ha llegado a un acuerdo y el tema se ha cerrado de forma positiva, al igual que se cerró el de las horas extraordinarias. No hay ningún problema al respecto.

P.- ¿Cómo valora el trabajo realizado a lo largo de este año por los sindicatos?

R.- Las organizaciones sindicales están actuando de forma coherente, solidaria, profesional, etc., para colaborar con la Administración entendiendo la situación por la que está pasando el país. Ahora mismo la relación con los sindicatos desde la Jefatura es fluida. Saben que en cualquier momento en que tengan un problema mi puerta está abierta para recibirles y tratar de darle solución a ese problema. Me considero una persona dialogante y cada vez que vienen, ya sea UGT, CCOO o CSI-F, que son los sindicatos con representación en la Mesa Negociadora, e incluso asociaciones como Pupolce o San Urbano, además del sindicato USO, pues les recibo. Escucho a todo el mundo porque por ser el jefe de la Policía Local no soy el más listo de la clase. En un momento dado puede haber un grupo de policías que esté viendo algo que no está funcionando, que se puede mejorar y por ello estoy abierto a recibir todo tipo de indicaciones y ayudas. Es más, ahora, a través de esta entrevista y de forma pública, les solicito que me apoyen en la difícil tarea que es dirigir un Cuerpo con tantas competencias y con tanta influencia en la ayuda ciudadana. Estoy agradecido por las ayudas que me prestan, aunque qué duda cabe que a veces, las demandas de los sindicatos, desde el punto de vista de la Jefatura, a lo mejor no las vemos y por ello hay que negociar, hay que hablar y es necesario llegar a un punto de encuentro. Gracias a Dios eso ya está ocurriendo y en la Policía Local hoy hay una paz social y sindical importante. No tenemos ningún problema pendiente y eso es algo importante.

P.- Yolanda Bel también informaba a finales del pasado año de que la Unidad de Proximidad Ciudadana (UPAC) iba a ponerse en marcha “en el primer trimestre del año”; en el mes de mayo todavía no hay noticias de la Policía de Barrio, ¿qué es lo que está ocurriendo?

R.- Ya sabemos lo que pasa con todas las Administraciones. Una cosa es el deseo y la buena voluntad que se tiene y otra cosa son luego los trámites burocráticos y administrativos. En primer lugar se aprobó el organigrama que yo preparé en Consejo de Gobierno. Esto trae como consecuencia la creación de la Unidad de Proximidad de Atención al Ciudadano (UPAC). Será una Policía que va a estar en los barrios, que no va a salir de su distrito y va a estar ahí prestando permanentemente sus servicios. En un principio se entendió que en un plazo de tres o cuatros meses podría estar funcionando pero lógicamente los trámites administrativos conducen a que se demore. Esos puestos ya están convocados por parte de Recursos Humanos en el Boletín Oficial de la Ciudad. Me parece que ya ha terminado el plazo de presentación y saldrá la lista de los policías que van a ocupar esas plazas. Si se cubre con los voluntarios, fenomenal, y si no, pues irá alguno forzoso hasta que se llegue a los 36 policías que cubrirán los nueve distritos que se van a crear a parte de los del Príncipe y Benzú, que ya están funcionando. El tema de la selección es lo que ha retrasado un poco la Policía de barrio, que garantizo que va a salir y creo que será para después del verano. Espero que la UPAC responda a las expectativas que tenemos, tanto el órgano político como yo como técnico en cuanto al resultado que pueda dar esta unidad.
 


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