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El delegado del Gobierno, Francisco Antonio Gozález, en
un rango de humildad y mostrando su cara más sincera ha
llevado al terreno personal su experiencia con el cáncer
para advertir que es una patología que tiene cura, que la
investigación, las terapias de seguimiento de la enfermedad,
la mejora en la planificación de la misma y la prevención,
abren nuevos y positivos horizontes.
La intervención de Francisco Antonio González Pérez ha
tenido lugar durante su intervención en la apertura de la IX
Jornada Oncológica donde se abordaba la importancia de los
registros de cáncer en la planificación de salud, un hecho
histórico en palabras del propio delegado del Gobierno para
nuestra ciudad.
La Jornada, reconocida de interés cientifico-sanitario, ha
contado con destacados ponentes de categoría científica que
han abordado temas relacionados con esta patología con
diversas intervenciones y mesas redondas sobre varios
aspectos concernientes a este ámbito.
González Pérez ha señalado que lleva varios años vinculado
“a los que están en esta causa, por lo que me siento como en
casa”. Destacó la persistencia como fundamental en el mundo
de la oncología, aludiendo a que, en esta ciudad, la
responsabilidad corresponde al Ministerio. Reconoció que “es
un hecho histórico que tengamos el registro de cáncer en la
planificación de salud y eso es muy importante para Ceuta”.
El delegado del Gobierno declaró que, pese a las 16 salidas
diarias de barco hablamos de este handicap de aislamiento y
relató una experiencia personal. “Mi oncólogo Pedro
Ballesteros, cuando llegó de Granada yo tenía dos años ya la
enfermedad y ahora, entre su insistencia y mi ánimo, tenemos
el bicho medio matado”.
A continuación, mencionó que aprovechaba la presencia de los
medios de comunicación para divulgar un pensamiento personal
al que no se quería sustraer. “Como enfermo oncológico digo
que esto tiene cura”. Y se refirió no sólo al trabajo de
investigación sino al día a día, con la implicación médica
existente, mencionado las “batas blancas y verdes”,
sinónimo, según su propia concepción, del médico de Atención
Primaria o de quirófano y realizó una confesión. “Me siento
orgulloso del trabajo que desarrolla el mundo de la
Medicina. Es muy difícil conseguir la empatía del médico con
el enfermo, pero existe”.
Francisco Antonio González Pérez señaló que “la vocación es
fundamental en esto; es lo que hace implicarse en las
especialidades”.
En este ámbito González Pérez quiso expresar su
reconocimiento “a ese equipo que está cambiando la faz de
ese mundo en el que nos desenvolvemos”. En el preámbulo del
acto inaugural intervino Ana Isabel Rivas Pérez, jefa del
Servicio de Epidemiología de la Consejería de Sanidad de
Ceuta.
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Una experiencia personal como mejor testimonio
El delegado del Gobierno, haciendo
abstracción de su condición política, trascendió al terreno
personal y en un alarde de sinceridad y valentía, confesó su
experiencia personal como enfermo oncológico, con una
sencillez extraordinaria. Y en realidad, su sentido
comunicativo para trasladar su experiencia, ha supuesto el
mejor valor de autenticidad que se le podía otorgar. La
fuerza de su testimonio ha ido pareja a la seriedad de la
patología y a las posibilidades reales de superar el cáncer.
Un canto a la esperanza y al reconocimiento a los avances
tecnológicos. Por ello, la fuerza de un testimonio vivo y
cercano, le otorga a Francisco Antonio González Pérez, un
plus de credibilidad innegable. Su tenacidad y fuerza de
voluntad, no se le pueden negar. Todo un ejemplo, para
quienes luchan contra esta terrible enfermedad que los
avances científico van venciendo cada día más.
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IX Jornada Oncológica
