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Un yihadista marroquí identificado como Mohamed Hamduch y
perteneciente a la red dirigida por el español Mustafa Maya
Amaya, que fue desarticulada en marzo, ha aparecido en Siria
fotografiado junto a cinco cabezas de soldados sirios que
supuestamente ha decapitado.
El diario marroquí Al Ajbar publicó auer esta foto y
declaraciones de Hamduch, recogidos de una página de
internet que no identifica, en la que el yihadista amenaza
además con “la conquista del Marruecos islámico” junto a
otros correligionarios.
Según el artículo, Hamduch, originario de Castillejos está
casado con una española de Ceuta identificada como Asia
Ahmed Mohamed, que también tiene nacionalidad marroquí, tras
un matrimonio “legalizado” por un tribunal del Estado
Islámico de Irak y Levante (EIIL), al que pertenecen ambos.
Castillejos se ha convertido en uno de los focos del
yihadismo marroquí, y varios de los yihadistas españoles
salidos de Ceuta a Siria habían sido adoctrinados y
entrenados en esta ciudad vecina.
Hace dos semanas, un responsable policial marroquí declaró,
en una inusual entrevista televisiva, que hay cerca de mil
yihadistas marroquíes combatiendo en Siria, y mostró su
preocupación porque, tras detectarse un movimiento de ida,
ahora hay decenas de ellos que regresan cada mes a
Marruecos, desencantados con la guerra de facciones en que
se ha convertido la yihad en el país oriental.
La policía ha detenido a varias decenas de estos yihadistas
nada más poner el pie en Marruecos, acusándolos de tener
“proyectos destructivos” en su propio país.
Sin embargo, los salafistas marroquíes niegan tener
intención de atentar en su país, y para demostrarlo veinte
de estos yihadistas retornados de Siria firmaron el domingo
pasado una carta en la que proclamaron que no tienen
intención de ejercer la violencia en su país y se
desmarcaron de todo “proyecto destructivo”.
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