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La decisión del Gobierno de dejar de sacar a concurso
cualquier gasto público superior a 500 euros ha sido
aplaudida por los empresarios. Sin embargo, para ellos esta
era una medida que nunca se tenía que haber llevado a cabo y
así lo trasladan desde la Confederación de Empresarios de
Ceuta (CECE). Su presidente, Rafael Montero Ávalos, cuenta
como es positivo que el Gobierno haya rectificado, pero
también señala que desde la patronal les habían avisado ya
de los problemas que acarrearía la medida “desde antes de
que se pusiera en marcha” y lamenta que no se les haya
tenido en cuenta. “Nos gustaría que cuando nosotros decimos
algo o hacemos un escrito, se nos haga más caso”, manifiesta
en declaraciones a EL PUEBLO.
Sobre la medida, Montero Ávalos señala que estaba haciendo
“un daño directo” a las empresas locales y cita como ejemplo
la adquisición de papel higiénico. “Hasta ahora el Parque de
Bomberos lo podía adquirir con una empresa, la Policía Local
con otra y el Instituto Ceutí de Deportes con otra distinta,
sin embargo, si hay que sacar a concurso este suministro se
saca el de todos los servicios públicos y para un año, por
lo que ninguna empresa pequeña de Ceuta puede ir a ese
concurso”, explica. En esta situación, el presidente de la
patronal asegura que se estaba abriendo la puerta a empresas
del resto de España que, aunque no fueran a ganar dinero,
podían ampliar su área de influencia.
Pequeñas obras
En el apartado de las obras públicas, donde el límite para
licitar marcado por la ley es de 50.000 euros, Montero
Ávalos cuenta como la medida que obligaba a sacar a concurso
todas las que superaran los 500 euros, suponía acabar con
las pequeñas empresas ceutíes que ahora sólo se dedican a
“subsistir”. “Después de la crisis de la construcción,
gracias a las pequeñas obras que se hacen las empresas se
van manteniendo, pero si automáticamente esas obras que
nunca pasaban de 50.000 euros, salen a concurso, una empresa
que puede estar en Algeciras y tiene la plantilla sin hacer
nada, con pagar las nóminas a los trabajadores, le interesa
presentarse”, señala para alertar que, al final, la medida
sólo serviría para “evadir economía ceutí a través de
empresas de fuera y destruir empleo en Ceuta”.
Montero Ávalos cuenta como, a pesar de que la restricción
sólo ha estado en marcha un mes y medio, ya había algunas
empresas de construcción planteándose en reducir plantilla.
Y es que, recuerda, un concurso también supone que los
procesos sean más lentos y “se pierda operatividad”. Por
eso, desde la CECE incluso estaban preparando una rueda de
prensa para pedir al gobierno que rectificara y evitar,
dentro de la legalidad, que otras empresas foráneas vinieran
a Ceuta a llevarse el dinero con el que se mantienen puestos
de empleo en la ciudad.
Ante este panorama ‘negro’, desde la CECE aplauden la
rectificación del Gobierno, pero también alertan de que es
prioritario que el Ejecutivo de Vivas tenga mayor
sensibilidad para con los empresarios y cuenten con ellos
para ir adoptar medidas que ayuden a dinamizar la economía.
Sin embargo, para Montero Ávalos, el Ejecutivo no aprovecha
“como debería” a los interlocutores que tienen. “Les iría
mejor en algunos aspectos, para no tener que estar
rectificando”, afirma para añadir que, yendo de la mano, a
lo que el Gobierno pretende políticamente, puede buscársele
cabida económicamente.
No se escucha a la patronal
Pero hasta ahora, esa estrecha colaboración no se da y una
muestra de ello ha sido la última cumbre mantenida entre
Ceuta y Melilla esta misma semana. Montero Ávalos señala
como esta reunión era una buena ocasión para sentar también
a los agentes económicos de ambas ciudades y abordar
problemas conjuntos. Sin embargo, no se les ha tenido en
cuenta cuando el Gobierno de España si se acompaña de los
empresarios en cumbres con otros estados, y así lo recuerda
el presidente de la patronal.
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La patronal pide una revisión del IPSI en profundidad y no
sólo para “subir al alza” los tipos impositivos
Durante la reunión que mantuvieron
el pasado jueves los presidentes de Ceuta y Melilla, ambos
se marcaron el reto de revisar el IPSI para ayudar a sus
respectivas economías. Un anuncio que ha sorprendido a los
responsables de la Confederación de Empresarios porque,
según señala su presidente, el IPSI “es el impuesto que más
revisiones ha tenido, pero sin que se haya hecho nada
concreto más que subirlo”. “Seguimos teniendo los mismos
problemas”, lamenta Rafael Montero Ávalos, para reiterar que
“sólo tocar al alza” el IPSI ha sido perjudicial. Por eso,
les lanza un mensaje a los líderes políticos para que “no
revisen más” el impuesto en la línea en la que se ha
revisado en los últimos años.
Por su parte, la Confederación de Empresarios está haciendo
su propio análisis del IPSI y de hacia dónde creen los
empresarios que se debería dirigir el impuesto. Un estudio
que está en marcha y que aún no tiene fecha de finalización.
Aunque se espera hacerlo en los próximos meses.
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Economía / Contratos con la
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