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Una indemnización de 120.000 euros para su hija y otros
60.000 euros para los padres, serían las cantidades
económicas que Marvin Juárez debería pagar por los daños
morales que ha causado a la familia de Ikram y que no podrá
pagar al declararse insolvente. Sin embargo, por otro cauce
judicial los padres de la joven fallecida podrían reclamar
las indemnizaciones al Estado. Cifras que para ambos, Latifa
y Malik, no significaban nada: “¿Para qué nos sirve una
indemnización si una vida no se compra y nadie la
devuelve?”, lamentaron. Padres, hermanos y familiares
cercanos presenciaron la sesión de mañana del juicio aunque
por la tarde, sólo uno de los hermanos fue capaz de
soportar, una vez más, el “dolor y la impotencia” tras la
pérdida de Ikram. Por eso, ni las penas de prisión lograron
aliviar ni la más mínima sensación. “El daño ya esta hecho;
mi hija no va a volver, me da igual que esté arrepentido o
que lo pongan en la calle porque nos falta un dedo de la
mano”, ya que Ikram era la quinta de dos varones y tres
hembras. La pequeña, hija de la pareja, permanecerá bajo la
custodia de su abuela materna.
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juicio sobre violencia de género
