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					La autopsia de la joven Laura Gutiérrez Martín se alargó 
					durante toda la tarde de ayer en el Tanatorio de Santa 
					Catalina. Según pudo saber este diario cuando se trasladó al 
					lugar sobre las 20.00 horas, los forenses continuaban 
					trabajando. Allí también se había desplazado un miembro de 
					los Juzgados.  
					 
					El traslado del cuerpo de la víctima a su localidad natal, 
					la Línea de la Concepción, se prevé a lo largo de esta 
					mañana, según informaron fuentes del cementerio. El cadáver 
					de la joven pasó la noche en Santa Catalina.  
					 
					Hasta la ciudad viajaron ayer varios familiares de la 
					estudiante, entre ellos, su padre y un tío. Ambos se 
					encontraban por la tarde a las puertas de las dependencias 
					del Cuerpo Nacional de Policía en la calle Colón. Junto a 
					ellos, también estaban varios amigos y conocidos, quienes 
					consolaban al padre de la víctima. Estos últimos prefirieron 
					no hacer declaraciones tras el suceso. Finalmente, este 
					diario se trasladó a última hora de la tarde hasta el lugar 
					en el que se produjo el crimen, el portal 2 del edificio 
					Calypso en la calle Agustín Muñoz Vázquez. Allí, algunos 
					vecinos volvieron a insistir en que no conocían a la 
					víctima. “La verdad es que no sabíamos nada”, comentaban. 
					Sin embargo, uno de los residentes sí que aseguró que se 
					habían oído gritos durante la mañana. Otra vecina explicó 
					que a la víctima le faltaban “unas pocas asignaturas” para 
					convertirse en enfermera.  
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